Al preguntarnos de qué manera podemos representar mejor la superficie terrestre, pensemos que ésta es un espacio curvo, denominado geoide.

Sin embargo, desde un punto de vista geométrico, se acostumbra utilizar la figura de un elipsoide como la representación más adecuada. A pesar de ello, es más común que consideremos a nuestro planeta como una esfera, la cual comparte una relación topológica con el elipsoide, ya que es relativamente fácil pasar de un elipsoide a una esfera de igual superficie.
